Los pobres no tenemos amigos,
sólo compañeros de camino.
Yo cosí mis zapatos viejos
y caminé sin un centavo en los bolsillos.
Sé de las hierbas que se hacen miel
sobre la lengua sin saliva.
Soy de los que caminan
y cada vez más lejos les queda el sueño.
A pesar de todo,
soy de los que no entierran la esperanza.
Humberto Ak´abal
Poeta guatemalteco maya-quiché
Poema "Uno de ellos"
Fotografía de Sandra Sebastián
Marcha Indígena Campesina y Popular 2012